Este informe fue socializado en el marco de la conmemoración del Día de la Mano Roja (una iniciativa contra la utilización de niños y niñas en las dinámicas de la guerra) y busca ayudar a esclarecer las dinámicas históricas del reclutamiento y la utilización infantil en el marco del conflicto.

El texto visibiliza las causas previas, la situación vivida durante el reclutamiento y las consecuencias del mismo. Es un informe que reconoce la voz de quienes han sido reclutados, dándoles un papel fundamental en la construcción de memoria y visibilizándolos como sujetos históricos y sociales. La investigación, que se encuentra principalmente enfocado al fenómeno del reclutamiento, aborda temas relativos a la diferenciación territorial, lo que refleja que las ciudades han sido, y aún son, un escenario importante para la comprensión del fenómeno y para la prevención del mismo.

Uno de los aspectos validados a partir de los datos que presenta el informe es que no pueden negarse las variaciones regionales en el proceso de reclutamiento y utilización de menores y que estas van directamente ligadas a la consolidación de los actores armados en lugares donde lograron una regulación sólida de la cotidianidad; además se evidencia que no existe una homogeneidad al interior de las regiones. Un dato clave que evidencia el papel de las ciudades en el fenómeno del reclutamiento y utilización infantil es que entre los años 1997 y 2005 el fenómeno pasó de ser principalmente rural a convertirse en un fenómeno presente en las ciudades; capitales como Bogotá, Medellín y Villavicencio fueron algunos de los centros urbanos que se convirtieron en escenario de este flagelo.

Se asegura que el consumo de sustancias sicoactivas se convierte en un factor de riesgo frente al reclutamiento y se establece que los Grupos Armados Posdemosvilización- GAPD- están utilizando estas sustancias como técnicas para el reclutamiento y utilización infantil, especialmente en territorios de frontera y en zonas de asentamiento urbanos que registran alta vulnerabilidad. La utilización de los menores se ha transformado en los trabajos de siembra, procesamiento, transporte y comercialización de la droga, pasando del tradicional contexto rural a las labores urbanas vinculadas a sustancias como la marihuana y el bazuco.

Según el informe, no solo los grupos al margen de la ley han sido protagonistas del reclutamiento infantil, el texto menciona que agentes estatales han empleado técnicas de vinculación de menores, lo que se ha hecho evidente en contextos urbanos y rurales.

En cuanto a la prevención del reclutamiento y utilización de niños, niñas y adolescentes por parte de grupos armados ilegales y legales, es necesario explorar el fenómeno a la luz de la perspectiva territorial-local, social e histórica. Para ello se sugiere que es fundamental monitorear, recolectar datos y analizar indicadores de carácter local, lo que se fortalecería con instrumentos de análisis y observación territorial y la posible creación de un sistema de alertas que posibilite la actuación sobre ciertos territorios.

En conclusión, el informe refleja que la realidad del reclutamiento de niños, niñas y adolescentes no ha sido un fenómeno ajeno a los territorios urbanos, y que por el contrario, en años recientes ha dejado de ser fundamentalmente rural para presentarse también en las áreas urbanas, sin embargo allí las dinámicas son distintas, porque lo que es clave, para observar y analizar los hechos, que se estudie el flagelo a partir de una diferenciación territorial y un contexto social.