En este escenario, las propuestas de quienes aspiran a la presidencia ofrecen diversas miradas y estrategias para abordar el futuro urbano del país.
Vivienda: acceso, calidad y equidad territorial
Uno de los temas centrales en las plataformas de las candidaturas es el acceso a la vivienda digna. Frente al déficit habitacional que supera las 600 mil unidades, las propuestas convergen en la urgencia de acelerar la construcción de viviendas sociales, pero divergen en los mecanismos y enfoques.
- Construcción masiva y alianzas público-privadas: Algunas candidaturas proponen fortalecer la colaboración con actores privados para incrementar la oferta de vivienda, mediante incentivos tributarios y flexibilización de normativas. Otras enfatizan un rol más protagónico del Estado, con fondos públicos directos y la creación de empresas estatales de construcción.
- Enfoque territorial y diversidad urbana: Varias propuestas destacan la necesidad de evitar la reproducción de guetos urbanos y promover la integración social. Se plantea redensificar áreas centrales, rehabilitar barrios consolidados y priorizar soluciones habitacionales cerca de servicios y empleos.
- Participación y autogestión: Al menos una parte de las candidaturas incorpora la autogestión y la coproducción de vivienda, promoviendo la participación de comunidades y cooperativas en la planificación y ejecución de proyectos.
- El acceso a la vivienda de segmentos socioeconómicos medios y emergentes: el sostenido incremento de profesionales universitarios junto a los cambios en la sociedad de nuevas generaciones con diversidad de intereses ha llevado a un déficit en la oferta habitacional para estos segmentos. Dado que no están en la categoría para recibir subsidios directos y completos para la vivienda y tampoco son clientes preferentes de la banca para darles crédito, se transforman en un nicho que despierta la atención de los candidatos con distinta intensidad. Sus propuestas se focalizan en departamentos pequeños y funcionales cercanos a vías de comunicación vial expeditas.
Movilidad y transporte sostenible
La movilidad urbana es reconocida como un factor transversal para la cohesión social y el desarrollo económico. Ante la congestión, la contaminación y la inequidad en el acceso al transporte, las propuestas presidenciales abordan el tema desde distintas aristas:
- Modernización del transporte público: Prácticamente todas las candidaturas proponen inversiones para ampliar la red de Metro en Santiago y otras ciudades, mejoras en la flota de buses eléctricos, y una integración tarifaria regional. Se discuten subsidios diferenciados según nivel socioeconómico y mayor participación de gobiernos locales en la gestión.
- Movilidad activa y sustentable: El impulso a la infraestructura para ciclovías, veredas seguras y peatonalización de áreas céntricas es un punto en común. Algunas propuestas incluyen incentivos para el uso de bicicletas y transporte no motorizado, junto con campañas de educación vial.
Descentralización del transporte: Destaca el fortalecimiento de sistemas intermodales, trenes de cercanía y proyectos para conectar zonas rurales con polos urbanos.
Espacio público y calidad de vida
El espacio público es considerado un derecho y una herramienta para la integración social. En las plataformas presidenciales, el énfasis está puesto en recuperar plazas, parques y bordes fluviales, así como aumentar la superficie verde por habitante en ciudades intermedias y comunas periféricas.
- Regeneración urbana y justicia espacial: Existen propuestas para aumentar la inversión en barrios históricos y espacios públicos deteriorados, con programas de participación ciudadana y financiamiento mixto.
Seguridad urbana: Algunas candidaturas integran el diseño urbano con estrategias de prevención situacional, mejorando la iluminación, la accesibilidad y la presencia de servicios en espacios públicos como parte de un enfoque integral de seguridad. - Cultura y apropiación: Se promueve el fomento de actividades culturales, ferias, circuitos deportivos y manifestaciones artísticas en el espacio público, como mecanismos para revitalizar la vida barrial y generar sentido de pertenencia.
Medio ambiente y resiliencia urbana
La crisis climática ocupa un lugar protagónico en los planes de desarrollo urbano. Las candidaturas presentan propuestas que van desde la promoción de ciudades “verdes” hasta la integración de criterios de adaptación y mitigación en toda la política urbana.
- Infraestructura verde y naturaleza urbana: Se proyectan planes para aumentar la forestación, construir corredores ecológicos urbanos, recuperar humedales y cuerpos de agua, y fomentar techos y muros verdes en edificios públicos y privados.
- Gestión del agua y riesgos: Se incluyen propuestas para modernizar redes de agua potable, sistemas de drenaje y gestión del riesgo de inundaciones, con proyectos piloto en ciudades vulnerables a eventos extremos.
- Normativas y planificación: Algunas candidaturas impulsan la revisión de los instrumentos de planificación territorial para incorporar criterios de sustentabilidad, eficiencia energética y reducción de emisiones en los proyectos urbanos.
Gobernanza urbana y descentralización
Un tema transversal en las plataformas de las candidaturas es la necesidad de avanzar hacia una mayor descentralización en la toma de decisiones. Esto implica fortalecer el rol de los gobiernos regionales y municipales, dotándolos de mayores competencias, recursos y capacidad de gestión.
- Planificación participativa: Varias candidaturas proponen establecer mecanismos vinculantes de consulta ciudadana para grandes proyectos urbanos, así como fortalecer los consejos de desarrollo local y la transparencia en la gestión de recursos.
- Descentralización fiscal y administrativa: Hay propuestas para reformar el sistema de financiamiento local, permitiendo a municipios captar recursos y gestionar fondos con mayor autonomía, especialmente para enfrentar desafíos urbanos específicos de cada territorio.
Innovación y tecnología urbana
El desarrollo de “ciudades inteligentes” aparece como una tendencia en las distintas propuestas. Entre las ideas más comunes se encuentran:
- Digitalización de servicios urbanos: Implementación de plataformas digitales para la gestión de trámites municipales, información en tiempo real sobre transporte y servicios urbanos, y plataformas de participación y denuncia ciudadana.
- Sensores y datos urbanos: Uso de tecnologías para monitorear calidad del aire, gestión de residuos, seguridad y movilidad, facilitando la toma de decisiones basadas en evidencia.
- Apoyo a emprendimientos tecnológicos: Programas de financiamiento y aceleración para startups que desarrollen soluciones urbanas innovadoras, desde energía limpia hasta logística y distribución en ciudades
Desafíos y oportunidades
El debate presidencial de 2025 sobre desarrollo urbano refleja la conciencia de que el futuro de Chile dependerá en gran medida de la calidad y equidad de sus ciudades. Si bien existe consenso en torno a ciertos objetivos —acceso a vivienda, movilidad sostenible, resiliencia climática—, el énfasis y los métodos propuestos divergen según la visión ideológica y la estrategia de cada candidatura.
El verdadero desafío será pasar del diagnóstico y las promesas a la implementación efectiva. Los próximos años serán clave para monitorear el avance en la concreción de estas propuestas, evaluar los mecanismos de participación ciudadana y adaptar las políticas urbanas a los cambios demográficos, tecnológicos y ambientales.
Ideas finales
Las propuestas de los candidatos y candidatas presidenciales en materia de desarrollo urbano para 2025 muestran un panorama de ideas y prioridades que, si bien comparten ciertos principios, se diferencian en la profundidad de los cambios y el rol que atribuyen a cada actor. La elección presidencial será, en consecuencia, también una decisión sobre el rumbo que tomarán las ciudades chilenas en el siglo XXI: más inclusivas, sostenibles y participativas, o bien continuando sendas de desigualdad y fragmentación urbana.
Uno de los temas escasamente abordado es la planificación rural y el impacto de la migración campo – ciudad que se ha mantenido de manera creciente. Del mismo modo, el impacto migratorio, especialmente de migrantes irregulares quienes someten a las ciudades a un stress complejo dadas sus necesidades de supervivencia.
El seguimiento a estos compromisos será fundamental para la construcción de un Chile urbano más justo y resiliente.