Pasados 13 años del último censo poblacional en Colombia, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) se dio a la tarea de actualizar esta información demográfica en el país bajo una metodología que plantea dos fases: la primera, el eCenso o Censo electrónico, mediante el cual los colombianos podrán diligenciar un formulario digital. La segunda, la visita tradicional de un censista ‘puerta a puerta’ que iniciará en abril en los departamentos y ciudades que tienen alrededor del 63% de la población del país, tales como Cundinamarca, Antioquia, Santander, Valle, Bolívar, Atlántico, Norte de Santander y, por sus características especiales, el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina; en mayo se realizará en Córdoba, Sucre, Cesar, Magdalena, Arauca, Casanare, Meta, Boyacá, Caldas, Risaralda, Quindío, Tolima, Cauca y Huila, y en junio en los departamentos con alta presencia de población étnica.

Al respecto, el alcalde de Támesis (Antioquia), Alexander Zuluaga, afirmó que según el censo de 2005 la población de este municipio es cercana a los 14.700 habitantes, no obstante, se estima que en los últimos años se ha generado un proceso de repoblamiento que aumenta esta cifra a un promedio de 16.000 habitantes. Por tal razón, señaló que actualizar en identificar las características de la población es una oportunidad para poder determinar la capacidad que desde lo público se puede generar para tener una buena planeación en lo territorial y en las inversiones en infraestructura, proyectos sociales, prestación de servicios públicos, entre otros.

“Tener una caracterización poblacional nos permite tener instrumentos para llevar una mejor calidad de vida a los habitantes”, aseguró el mandatario local. De ahí que conocer la demográfica del municipio, los comportamientos, la capacidad de generación de ingresos, la empleabilidad y los rangos de edades, les permite a los mandatarios locales ser más asertivos en la instrumentalización de decisiones para generar un impacto positivo en el territorio.

De acuerdo con Zuluaga, los municipios de cuarta, quinta y sexta categoría han tenido grandes dificultades por la falta de información etnográfica que genera delimitaciones y por la desactualización de los Esquemas de Ordenamiento Territorial (EOT). “Estos dos instrumentos son los que permiten una buena planeación territorial y social; carecer de esta información nos impide pensar en una visión de desarrollo a largo plazo, ya que siempre estamos tomando decisiones sobre cifras que ya no son la realidad y que no permiten cuantificar y menos hacer un ejercicio de prospectiva”, dijo el alcalde.

Sobre el componente digital del censo, el mandatario local consideró que es una estrategia en cierto sentido excluyente, teniendo en cuenta que algunas áreas rurales del municipio todavía no tienen una conectividad al mismo nivel de las grandes conurbaciones y ciudades, lo que podría convertirse en una limitante para que los ciudadanos suministren su información.

“Es un tema complejo porque en corregimientos y áreas apartadas la conectividad es inexistente, adicionalmente los instrumentos tecnológicos para cierta población se hacen difíciles por lo que no deja de ser un tema excluyente para cierta población rural”, expresó.

No obstante, Zuluaga reconoció que es necesario buscar alternativas que le permitan accesibilidad a toda la población y de ahí que se esté avanzando en el municipio, generando conectividad en las plazas públicas de manera gratuita bajo el proyecto ‘Internet al parque’, que tiene capacidad de 300 usuarios activos. Asimismo, la administración está adelantando la gestión para que uno de los corregimientos también tenga conectividad abierta al público en su plaza principal.